La inflamación es un proceso natural del cuerpo que actúa como mecanismo de defensa ante lesiones o infecciones. Sin embargo, cuando se prolonga en el tiempo, puede volverse crónica y contribuir al desarrollo de diversas enfermedades. A continuación, exploramos los aspectos más importantes de la inflamación y cómo controlarla.
La inflamación es la respuesta del sistema inmunológico ante daños en los tejidos, infecciones o sustancias irritantes. Se manifiesta como una señal de alerta para reparar el daño y combatir patógenos. Si bien es un proceso natural y beneficioso en el corto plazo, la inflamación crónica puede provocar enfermedades como la diabetes, artritis, obesidad y trastornos cardiovasculares.
Además de mejorar la alimentación, otros hábitos pueden ayudar a mantener la inflamación bajo control: